La compañía noruega Hurtigruten Norway presentó recientemente las primeras imágenes e infografías de su proyecto de buque Sea Zero, un crucero que, según la empresa, será el más respetuoso con el medio ambiente del mercado.
Para lograrlo, planean un cambio total de paradigma al utilizar sólo fuentes renovables de energía como combustible y disminuir la huella de carbono que este tipo de naves genera hoy en día con su actividad.
La empresa, una de las pioneras en este nuevo concepto de crucero trasatlántico, moderno y ecológico ha revelado varias de las innovaciones tecnológicas que planean incorporar.
También adelantaron que la inversión inicial para la producción que ya se está realizando alcanza los 100 millones de euros y se planea ejecutar junto a otras inversiones en infraestructura, capacitación y desarrollo hasta alcanzar para principios de 2030 la salida al mercado del Sea Zero.
¿Mediante que mecanismos es impulsado el SEA Zero?
La quema de combustible necesario para mantener en movimiento un crucero es enorme, como lo es también su impacto en el medio ambiente.
Con esto en mente, Hurtigruten planea sustituir los combustibles fósiles por dos nuevas fuentes principales de energía: la eólica y la solar.
Para ello han proyectado tres enormes estructuras de 50 metros de altura que funcionarán como velas capaces de aprovechar la fuerza del viento y que estarán además completamente cubiertas por paneles solares.
Por un lado, mediante turbinas eólicas se puede convertir la energía cinética del viento (marinos y generados por el desplazamiento del buque) en electricidad al tiempo que se impulsa el propio navío.
La empresa ha destacado que estas turbinas son una forma limpia y sostenible de generar energía eléctrica sin producir emisiones contaminantes especialmente adecuadas para el contexto de los viajes por alta mar.
Por el otro, los paneles solares estarían especialmente enfocados en la recolección de energía para el funcionamiento de los diferentes componentes electrónicos del Sea Zero.
Partes elementales como las luces, la electrónica, la cocina, la refrigeración y la climatización podrían alimentarse mediante este sistema utilizando tecnologías que ya disponemos en la actualidad y que solo se deberían adecuar a este nuevo soporte.
Mediante ambos recursos tecnológicos, confían poder impulsar y mantener activo al crucero durante todo el viaje sin que demerite la cantidad ni calidad de los servicios que ya se ofertan en este tipo de viajes.
En el proyecto, se busca almacenar también una parte de la energía generada a través de un potente sistema de baterías sobre el que aún se está trabajando para elegir los mejores candidatos.
Eso sí, según los gerentes de la compañía, sostienen que una combinación de múltiples baterías de 60 MWh podrían brindar suficiente cobertura para asistir al movimiento y electrificación del crucero hasta que sean recargadas completamente tras llegar a puerto.
De esta manera esperan conservar una función óptima incluso si se carece de sol o viento suficiente por las condiciones climatológicas que cambian con relativa frecuencia en alta mar.
¿Cómo se conducirá el Sea Zero?
Otro aspecto interesante del Sea Zero será que todo su sistema tecnológico, así como diversos aspectos de su navegación estarán supervisados por una inteligencia artificial especializada, capaz de controlar en tiempo real y tomar las decisiones óptimas para el funcionamiento del buque.
Resulta chocante, pero lo cierto es que la empresa ha adelantado algunas de las posibles ventajas que tendría esta:
- Mejora de la seguridad: Un sistema de IA bien diseñado y programado con las medidas de seguridad adecuadas podría ayudar a reducir el riesgo de accidentes y mejorar la seguridad de los pasajeros y la tripulación.
- Mayor eficiencia en la navegación: Al aprovechar los algoritmos de IA para realizar cálculos complejos, tomar decisiones rápidas y ajustar la ruta en función de las condiciones del viento, la corriente y otros factores, se podría mejorar la eficiencia en la navegación y reducir los costos de combustible.
- Mejora en la experiencia del pasajero: Un sistema de IA podría adaptarse a los patrones de uso y preferencias de los pasajeros, lo que daría lugar a una mejor experiencia a bordo. Esto podría incluir adaptarse a las necesidades individuales de los pasajeros con respecto a la comida, el entretenimiento o las actividades, y ayudar a hacer recomendaciones personalizadas.
- Reducción de errores humanos: Un sistema de IA no tendría los mismos sesgos que los seres humanos y, por lo tanto, podría evitar algunos de los errores asociados con la navegación y el control de un crucero de pasajeros como la estimación de distancias, profundidad o el análisis de las variables climatológicas.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que todavía existen preguntas y preocupaciones sobre cómo se implementaría adecuadamente una IA en la navegación de un crucero.
Por ello se maneja un sistema de vínculo entre la IA y la tripulación que permita que siempre exista una relación de dependencia entre el complemento tecnológico y los profesionales humanos.
La IA sería siempre un complemento para ayudar a los navegantes en las tareas de supervisión y control del Sea Zero
Aunque el proyecto del Sea Zero posea sobre el papel unas características remarcables, afrontar su construcción supone un reto de grandes dimensiones para las fábricas y especialistas involucrados.
Es importante destacar que aún existe una gran limitación tecnológica en lo que respecta a la utilización de energías renovables en cruceros, ya que éstos requieren una gran cantidad de energía para moverse y para satisfacer las necesidades de los pasajeros.
Además, puede ser prohibitivamente caro instalar tecnologías verdes en un barco y la disponibilidad de recursos naturales como el sol y el viento puede ser limitada en algunas rutas.